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CONFLICTO Entrada tri-regional Consejo editorial interregional: Christine Diercks (Europa), Daniel Traub-Werner (América del Norte) y Héctor Cothros (América Latina) Copresidenta y coordinadora interregional: Eva D. Papiasvili
“ …de esta antítesis surge nuestra vida psíquica. ” (Freud, Carta a W. Fliess del 9 de febrero de 1899; en Freud, S. 1886-1899, p. 278).
I. INTRODUCCIÓN Y DEFINICIÓN
Freud fundó el psicoanálisis sobre la base del conflicto psíquico, es decir, sobre una comprensión del funcionamiento de la mente humana como una interacción de fuerzas y tendencias opuestas. El psicoanálisis pone especial atención a los efectos de los conflictos inconscientes, entendidos como interacciones entre fuerzas que el individuo desconoce. En un conflicto se enfrentan deseos, sentimientos, necesidades, intereses, ideas y valores opuestos. Según la teoría psicoanalítica, el conflicto es primordial para la dinámica de la mente humana y, desde el punto de vista del psicoanálisis clásico, viene impulsado por la energía (pulsión) instintiva y está mediado por fantasías afectivamente catectizadas. Todos los procesos mentales se basan en la interacción de fuerzas psíquicas conflictivas que, a su vez, mantienen interacciones complejas con estímulos externos. El principal objeto de estudio del psicoanálisis es el aspecto inconsciente y latente del conflicto psíquico que, en última instancia, se basa en los deseos infantiles reprimidos. Los contenidos inconscientes resurgen adoptando formas distorsionadas como en los sueños, lapsus (o parapraxis), síntomas y forma de manifestaciones culturales. Para Freud, el principal conflicto del psicoanálisis es el conflicto edípico. La disputa entre el deseo infantil y la prohibición es constitutiva de la dinámica de la vida psíquica y sus manifestaciones. Además de sus cualidades dinámicas, el conflicto también tiene varios componentes metapsicológicos: topográficos (consciente, preconsciente e inconsciente), económicos (sobreestimulación sensorial, realidad y principio del placer), genéticos (según el desarrollo de las funciones del yo) y estructurales (conflictos entre el yo, el superyó y el ello). Además, el conflicto edípico se establece dentro de la teoría dual de los instintos / pulsiones (instinto sexual / instinto de autoconservación, libido del yo / libido hacia el objeto, instinto de vida / instinto de muerte).
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