Diccionario enciclopédico de psicoanálisis de la API

Volver a la tabla de contenido

cualquiera de los dos modelos freudianos del aparato psíquico. [El primer modelo (Freud 1900) es el topográfico, que consiste en la división entre el consciente, el inconsciente y el preconsciente, cada uno con sus normas de funcionamiento; y el segundo (Freud 1923, 1926) es el modelo estructural, que divide el aparato psíquico en el ello, el yo y el superyó.] Los analistas franceses de América del Norte también incluyen en este grupo a dos autores de habla inglesa: Winnicott y Loewald. La “tercera topografía” / “tercer modelo” propone que, en el desarrollo humano, la mente de dos personas precede a la autonomía psíquica de una persona constituida por las pulsiones, las defensas y las fantasías intrapsíquicas descritas por Freud. Si bien el primer y el segundo modelo se han utilizado para describir la enfermedad neurótica como una mente en guerra consigo mismo, el “tercer modelo” describe un estado de la prehistoria del individuo en que la mente no siempre es capaz de funcionar dentro de su propio ciclo de representaciones, ni tampoco es capaz de juzgarlas como tales. Para empezar, depende del nebenmensch (Freud 1895), el prójimo, que la psique no se vea abrumada por excitaciones internas y externas. La modulación de la estimulación por parte del cuidador, quien asume la función de barrera de estímulos, permite que el bebé reconozca eventualmente los impulsos libidinales y agresivos como partes no traumáticas de sí mismo. De esta manera, el tercer modelo describe un tiempo en la vida del individuo que precede al desarrollo de los otros dos. El tercer modelo fue el último en ser descubierto, pero describe una situación previa en la vida del individuo. Desde el punto de vista del sujeto inconsciente , se considera que las personas que se encuentran dentro del rango neurótico-normal tienen una vida “interna”, mientras que las personalidades límite y los psicóticos no experimentan ni sus pulsiones ni sus fantasías como “internas.” Para pasar del pensamiento de proceso primario, en que los deseos se perciben como satisfechos, a uno en que los deseos se puedan experimentar en un espacio transitorio de verdad o falsedad, se necesita la intervención de un progenitor lo suficientemente bueno que actúe como prótesis y contenedor temporal. Según este modelo, todo ser humano comienza la vida en una situación de procesamiento psíquico de dos personas. En esta situación, el bebé y su entorno son una unidad operativa, y es solo con el tiempo y gracias a un trabajo psíquico considerable (generalmente inconsciente) por ambas partes que se establece una relativa autonomía intrapsíquica de una sola persona. Esta autonomía es un ideal universal del desarrollo que no todas las personas logran alcanzar, generalmente debido a deficiencias en el encuentro primario de dos personas. Para estos pensadores, retrospectivamente denominados del “tercer modelo”, la mente de una persona es un logro fluctuante, que puede perderse debido al estrés interno o externo. De forma independiente y casi simultánea, Jacques Lacan y Donald Winnicott formularon el principal dilema humano: con tal de convertirse en alguien, cada sujeto tiene que pasar a través de otro; otro real y conflictivo. Ambos autores escribieron acerca de la función espejo del objeto, en el caso de Winnicott (1967), como una oportunidad de encontrar un yo “verdadero” reflejado, mientras que para Lacan

326

Made with FlippingBook - Online magazine maker