Volver a la tabla de contenido
por una parte, y las contribuciones más recientes de la tradición independiente desde la escuela británica y Europa, por otra. Las corrientes kleinianas contemporáneas siguen basándose en (i) el concepto de “objetos internos inconscientes”; (ii) los mecanismos centrales de proyección- introyección, y (iii) la teoría revisada de las pulsiones como los principales determinantes de la motivación en conjunción con los “objetos internos”. El creciente interés en la oscilación entre las posiciones “esquizoparanoide” y “depresiva”, continúa generando nuevos hallazgos clínicos. Los hallazgos van desde nuevos encuentros el campo de la envidia constitucional, los tipos de organización patológica y las formas primitivas y psicóticas del complejo de Edipo, hasta avances significativos en la técnica kleiniana, incluida la dinámica del cambio psíquico, el trabajo sobre la contratransferencia y las interpretaciones “centradas en el paciente” y las “centradas en el analista”. Todos estos avances kleinianos siguen estando amparados por las contribuciones del análisis infantil y la psicoterapia infantil, especialmente por las estructuras no neuróticas. Los desarrollos contemporáneos de la corriente independiente presentan una serie de preocupaciones teóricas y clínicas alternativas: la interacción humana, el afecto, el ambiente, el trauma y el apego. Las corrientes contemporáneas de este enfoque, o conjunto de enfoques, reflejan el reajuste histórico del modelo freudiano clásico de la mente a partir de una conceptualización más amplia de las pulsiones (incluida, sobre todo, la pulsión de vida o de amor implacable), en lugar de simples pulsiones apetitivas y de satisfacción culminante. Para los analistas independientes, por tanto, la realidad externa sigue siendo la principal fuente de objetos que se internalizan. Este énfasis, en términos técnicos, se traduce en un énfasis en el encuentro analítico, sobre todo en la respuesta afectiva del analista a las comunicaciones conscientes e inconscientes del paciente. La nueva generación de psicoanalistas de la tradición independiente se dedica a explorar varias perspectivas de las relaciones objetales relacionadas, por ejemplo, con la temporalidad, los modos de incorporación y tipos de “objetos invasivos” y de dolor inexpresivo, la naturaleza de la ilusión, el significado del hogar psíquico, aspectos de la escucha en la transferencia- contratransferencia, la ociosidad y el trabajo de lo negativo y el psicoanálisis de la esperanza. Asimismo, en Latinoamérica, especialmente en Argentina, donde la genealogía de las relaciones objetales emana del psicoanálisis de Klein sobre el juego infantil, las elaboraciones regionales de las teorías de las relaciones objetales siguen arraigadas a la teoría kleiniana y sus avances, principalmente a través del trabajo de Bion, Meltzer y Winnicott. En este contexto, Pichon Riviere, “el rostro psicosocial” del psicoanálisis argentino, puso en marcha una importante corriente regional con su idea de que la psicología social debe ser entendida desde el psicoanálisis, mientras que el psicoanálisis debe ser también entendido como una psicología social. Esta idea, seguida por muchos de sus discípulos, produjo muchas formulaciones teóricas originales sobre diferentes tipos de objetos: buenos, muertos, medio muertos, medio vivos, enloquecedores,
675
Made with FlippingBook - Online magazine maker