Según la teoría de Einstein, cuando un objeto se acerca a la velocidad de la luz, el tiempo se hace lento. Supuestamente, si un objeto o un ser, puede igualar o exceder la velocidad de la luz, el tiempo tal como lo conocemos se detiene. Si existiese un ser (es decir, Dios), que vive en el mundo de la luz, ese ser no estaría limitado al marco del tiempo. En otras palabras Dios no estaría confinado al tiempo; sino que el tiempo estaría confinado a Dios. Científicamente hablando, un Dios eterno puede existir. Vale la pena hacer una nota al margen; al parecer Albert Einstein también creía en el diseño inteligente, pues dijo que Dios no juega a los dados con el universo. Como físico, el universo que observaba seguía leyes científicas y eso generaba la necesidad de un ser que sea el dador de esas leyes. También observó que había diseño y armonía, lo cual genera la necesidad de un diseñador.
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