En consecuencia, lo primero que tendremos que hacer será evaluar cuantitativamente los flujos de salida desde los almacenes. Los flujos de entrada, salvo que se recoja la mercancía, se incluyen con los movimientos de salida de los almacenes remitentes. Esto implica, necesariamente, observar los siguientes pasos: 1.º Asignación de la demanda a los diferentes almacenes o zonas de distribución cubiertas por rutas fijas. 2.º Cuantificación de la demanda en términos de la frecuencia de distribución (diaria, semanal, etc.), estimando: • Cantidad de órdenes de entrega (promedio y máximo del período establecido por rutas de reparto). • Volumen y peso de la carga a transportar. El objetivo final será transformar estos flujos de entrada/salida en términos de unidades de manipulación, tales como palés, contenedores, paquetes, etc., así como estimar su equivalencia en m 3 y Tm que son, en definitiva, los parámetros a utilizar en el transporte.
Recuerda
En el transporte de mercancías es fundamental seleccionar el vehículo más apropiado, utilizar razonablemente la flota y alcanzar un grado de ocupación de carga máxima.
3.1.3. Política de sustitución del vehículo Una empresa que cuente con su propia flota deberá implantar una política de sustitución y mantenimiento de los mismos. Si los vehículos llegan a una situación de obsolescencia, deberán ser sustituidos por otros si no pueden cum- plir con las nuevas exigencias de la empresa respecto a carga o velocidad (o si resulta excesivamente caro su man- tenimiento, que suele aumentar significativamente hacia el final de la vida del vehículo). Hay un punto en el que los costos variables de mantenimiento serán mucho mayores que los costos fijos de financiar un nuevo vehículo, aunque esto variará de acuerdo con la distancia recorrida.
3.2. TIPOS DE MANTENIMIENTO 3.2.1. Mantenimiento predictivo
Este tipo de mantenimiento está creciendo de la mano de la electrónica y de la informática, dando lugar a los lla- mados sistemas expertos de diagnosis . Este avance se ve favorecido por la continua disminución de precios de estos sistemas. El objetivo es predecir cuándo va a producirse un fallo, durante el normal funcionamiento de un equipo o vehí- culo. Precisamente, uno de los campos que más se ha desarrollado en este tipo de mantenimiento es el seguimiento de los motores diésel, mediante el análisis de los aceites usados, que permite establecer pautas para su correcto man- tenimiento. Estas operaciones se realizan habitualmente en el caso de grandes flotas de camiones o autobuses, en los que la cantidad y, por lo tanto, el precio de los consumibles, resultan apreciables, por lo que la optimización en su uso reviste una gran importancia. Para ello, se toma una muestra de aceite en el momento de su sustitución, evitando su contaminación con fac- tores externos, realizándose análisis de diversos tipos: • Medida de la viscosidad. • Análisis fisicoquímicos basados en la búsqueda de residuos de combustión, de dilución por agua o gasóleo y de oxidación.
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MANTENIMIENTO DE GRANDES FLOTAS
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