LA ECONOMÍA DIGITAL EN ESPAÑA. AVANCES Y RETOS POR REGIONES Y SECTORES
Gráfico 6.3. Evolución de las diferencias entre regiones de la intensidad digital del VAB. 2011-2021 (coeficiente de variación en términos porcentuales).
(1,5 puntos porcentuales). En todas las regiones, salvo en Ceuta y Melilla, el crecimiento de la intensidad digital en 2021 fue superior al observado en 2020. Una de las ventajas de la base de datos creada es que dispone de información del VAB generado en cada uno de los sectores de actividad para cada región. Se puede, por tanto, analizar las diferencias en la especialización productiva regional en sectores digitalizados. Para ilustrar las diferencias de especialización digital entre comunidades autónomas, se utiliza la clasificación sectorial mostrada en la sección 4 (Cuadro 4.1), que clasificaba los sectores en tres grupos: alta, media o baja digitalización. El Gráfico 6.5 muestra la distribución porcentual del VAB en cada región en función de estas tres categorías. Si las regiones se ordenan por el peso de los sectores de alta digitalización, el ranking es similar al que se ofrecía en el Gráfico 6.2, relativo a la ratio ente el VAB digital y el VAB total, aunque también hay diferencias. Madrid es la región con mayor peso de los sectores de alta digitalización, con notable ventaja sobre las demás. El 34,8 % del VAB en Madrid se corresponde con los sectores con mayor digitalización, frente al 27 % de Cataluña, el 24,5 % del País Vasco o el 24,3 % de Navarra. Con menor peso de los sectores de alta digitalización, se encuentran Ceuta y Melilla, Extremadura, Canarias, las Islas Baleares y Castilla-La Mancha, todas ellas entre el 7,8 % y el 14,7 %. El peso regional de los sectores menos digitalizados también presenta diferencias entre comunidades autónomas. En las Islas Baleares, Canarias y Andalucía, el peso de los sectores de baja digitalización es elevado, en comparación con el resto de España, con valores comprendidos entre el 51,7 % y el 61,1 %. Estas regiones tienen en común un elevado peso del sector turístico, en el que la hostelería tiene un papel importante, o del sector primario y/o las actividades inmobiliarias y la construcción.
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Fuente: INE (EPA microdatos, EES microdatos, CNE y CRE), Fundación BBVA e Ivie (2023) y elaboración propia.
Por regiones también se observa que la economía digital fue capaz de resistir mejor los efectos de la crisis sanitaria de la COVID-19, y que esta ha supuesto un efecto catalizador (Gráfico 6.4). Salvo en cuatro regiones (Ceuta y Melilla, Aragón, Extremadura y Castilla- La Mancha), la intensidad digital aumentó en todas las demás incluso en 2020. Esto demuestra que la economía digital fue más resiliente que el resto de la economía. Pese a la reducción generalizada del VAB en todas las regiones en 2020, el peso del VAB digital sobre el VAB total aumentó 0,5 puntos porcentuales en Cantabria, las Islas Baleares, Cataluña y el País Vasco. En el resto, el aumento fue más modesto. Sin embargo, lo llamativo es la aceleración generalizada en todo el país del crecimiento de la intensidad digital en 2021. Destaca el País Vasco, en el que la intensidad digital aumentó 2,3 puntos porcentuales, pero también La Rioja (1,9 puntos porcentuales), Galicia (1,6 puntos porcentuales) o Navarra y Extremadura
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