Al Día Sexta Edición de 2023

FORMACIÓN EMPRESARIAL

Todo depende de la mentalidad

proyecto. ¿Me echas una mano?”. A diferencia de estos, quienes insinúan sus intenciones dirían simplemente: “Tengo un proyecto muy difícil y no estoy seguro por dónde comenzar”. El primer ejemplo va al grano y requiere un sí o un no por respuesta. En el segundo, la petición va disfrazada de declaración a fin de no parecer una imposición e implica que se espera algún ofrecimiento, lo que puede llevar a la frustración si no se capta el mensaje.

Hace algunos años, un diálogo abierto en las redes sociales reveló que la gente se expresa de dos maneras: unos que piden directamente lo que quieren y otros que se sirven de las indirectas. Se trata de actitudes aprendidas en la niñez que van pasando de una generación a otra en el entorno familiar. Quienes piden directamente lo hacen partiendo del supuesto

En otras palabras

ejemplo: Pregunta directa: Mira, necesito tu ayuda con un proyecto. ¿Me echas una mano? Con indirectas: Tengo un proyecto muy difícil y no estoy seguro por dónde comenzar.

Cuando estos dos grupos se cruzan, tarde o temprano hay problemas de comunicación. Si bien no hay estilos de comunicación correctos o incorrectos, existen más limitaciones para quienes solo dan a entender lo que buscan. Un modo de comunicación sutil funciona mejor con personas cuyas expectativas y señales coinciden, que se reduce básicamente a los parientes más inmediatos. Durante sus interacciones

de que está bien expresar lo que quieren, sin preocuparse por una posible negativa. Por otro lado, quienes insinúan sus intenciones evitan solicitar algo a menos que estén seguros de que su interlocutor accederá. Dependen de expectativas y señales compartidas. Su comunicación es muy matizada, y antes de pedir algo prefieren sondear la situación y el estado de ánimo de los demás. Se limitan a hacer declaraciones y confían en que alguien se ofrecerá a ayudar, en lugar de concretar una propuesta. Estas personas se incomodan al verse obligadas a decir que no, y evitan colocar a otros en esa misma situación. Por ejemplo, quienes piden directamente dirían algo así: “Mira, necesito tu ayuda con un

con familiares lejanos, compañeros de trabajo, jefes o nuevas amistades, quienes prefieren comunicarse de esta forma deben adaptarse. De otro modo, acabarán sintiéndose terriblemente frustrados, ya sea que busquen un ascenso, cerrar un trato con un cliente o defender sus intereses. A la hora de desarrollar su negocio Melaleuca, pueden sentirse como gallina en corral ajeno, por lo que les costará acercarse a los demás. Suelen estar más cómodos limitándose a hablar de los productos a la espera de que sus amigos les pidan más información, pero su negocio no crecerá mucho hasta que aprendan a expresarse a las claras. Más importante aún, sus clientes potenciales se perderán la oportunidad de cambiar la vida con productos transformadores e ingresos repetidos.

42 NOVIEMBRE-DICIEMBRE 2023 | MX.MELALEUCA.COM

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