Blog Sembrando hoy la Agricultura del futuro
•
Agricultura 5.0 o Inteligencia arti- ficial (AI por sus siglas en inglés) y “Deep learning”: En el contexto del COVID-19 estas tecnologías se presen- tan como alternativas útiles que permi- ten reducir la presencia de expertos en campo para optimizar el mantenimiento general de los cultivos agrícolas.
peratura y humedad en el mismo sitio. Pero sin lugar a duda, una de las mejo- res aplicaciones del loT en campo es el uso de drones que permiten monitorear y colectar datos empleando fotografías de alta resolución gracias a que poseen sensores sofisticados que permiten de- terminar la salud de un campo de culti- vo. Esta tecnología se combina en mu- chos casos con métodos de inteligencia artificial. Todo esto permite optimizar la producción agrícola a la vez que se lo- gra mayor sostenibilidad ambiental. En Uruguay se encuentra trabajando en este rubro la empresa Agrodrone, así como Skydrone del grupo Skyagri de Brazil. Blockchain: uno de los desafíos ante la actual pandemia es la inocuidad y producción sostenible de los alimentos que llegan a nuestra mesa, en momen- tos donde el tema sanitario es clave. El “blockchain” es una tecnología que permite garantizar el registro y trans- ferencia de datos entre los actores que participan en las cadenas agroalimen- tarias. Esto lleva a mayor trazabilidad, transparencia y confianza en situaciones complejas como las de hoy en día. Otra de las contribuciones del “blockchain” recae en la reducción del desperdicio de alimentos por medio del monitoreo de los cultivos en campo. Por otro lado, las cooperativas de agricultores podrían recompensar a los productores para que implementen prácticas mas sostenibles de manera que ellos logren una recom- pensa financiera por medio del “block- chain”. Granjas verticales, urbanas e “indoor” (granjas interiores): Desde hace algu- nos años, las tecnologías de granjas verti- cales, urbanas e “indoor” habían tomado fuerza como una solución para reducir el impacto causado por el sobreconsumo de recursos naturales como, por ejemplo, el agua, pero a su vez reducir los efectos del cambio climático en la producción agrícola. Sin embargo, en el contexto ac- tual, la población al pasar más tiempo en sus casas ha tendido a sembrar frutas y verduras en espacios físicos reducidos de sus hogares, en especial en grandes ciu- dades del mundo, creando lo que se lla-
man las granjas urbanas. En ciudades po- bladas como Bangkok, en Tailandia, se utilizan los techos de los edificios para tal fin. Otro beneficio de las granjas urbanas es la creación de espacios verdes dentro de la ciudad, lo que favorece el bienestar general de la población. En la actualidad ya existen empresas que producen horta- lizas en condiciones “indoor” y de ma- nera vertical, con rendimientos inclusive mejores de los que se pueden alcanzar en condiciones normales de campo. Esto aumenta la producción y permite obte- ner alimentos más nutritivos, seguros y sanos, debido, además, a que se reduce el uso de agroquímicos. Las empresas Hortipro de Chile y Granjas Verticales de México son ejemplos en la región de innovación con sus granjas verticales y tipo “indoor”. La agricultura regenerativa y la bioe- conomía , por ejemplo, a través de la producción de bionsumos, permiten re- emplazar los agroquímicos por produc- tos basados en recursos naturales, como bacterias y hongos benéficos, que se uti- lizan para el control de enfermedades en campo o como insumos para el adecua- do crecimiento de las plantas. Esto ade- más contribuye con la salud humana al favorecer el consumo de productos que provienen del campo con alto contenido nutricional. Aquí es importante desarro- llar y potenciar la investigación y el de- sarrollo basado en ciencia y tecnología en la región, de manera de poder buscar y caracterizar los bioinsumos necesa- rios para alcanzar dichos objetivos. Por suerte, América Latina es una fuente importante de recursos biológicos dis- ponibles para tal fin.
Muchas “startups” o empresas emergen- tes están desarrollado proyectos relacionados con la mejora de la productividad en campo y a la vez amigables con el ambiente. Los sistemas de inteligencia artificial o AI lo que buscan es replicar, de manera digital, el fun- cionamiento de las neuronas y el proceso de sinapsis en el cerebro, para detectar patrones y generar predicciones y recomendaciones basadas en la información con la que se ali- mente el sistema. Por ejemplo, en India se desarrolló una aplicación basada en inteli- gencia artificial en la nube, que ayuda a los agricultores a detectar enfermedades en cam- po. Esta aplicación no requiere ninguna ha- bilidad tecnológica sofisticada por parte del agricultor, ya que solamente es necesario un teléfono inteligente y tomar una foto del cul- tivo. La fotografía se sube a la plataforma de la aplicación junto con la ubicación geográfi- ca (GPS) con lo que se emite un diagnóstico que va de vuelta al agricultor, de manera re- mota, con información de las enfermedades o deficiencia nutricional en campo, así como métodos sugeridos para el tratamiento. Exis- ten en el mercado latinoamericano solucio- nes como ERPagro (en Chile y Latinoaméri- ca) que brinda soluciones para la precosecha y poscosecha de frutas y verduras y también ayudan con la gestión del negocio. • Internet de las Cosas (o IoT por sus siglas en inglés: Internet of Things): algunas soluciones tecnológicas en la agricultura van de la mano con aplica- ciones de loT, como sistemas y sensores que predicen las condiciones climato- lógicas, o sensores para optimizar las aplicaciones de pesticidas, computarizar información sobre malezas y determinar la presencia de plagas en campo. Un ejemplo de ello es el proyecto “Neltume Plagas” en Chile, que emplea un sensor adherido a trampas. Esto les permite monitorear la plaga Lobesia botrana, por ejemplo, pero a su vez medir la tem-
•
•
•
Algunas empresas que trabajan en este rubro se encuentran ubicadas en Guatema- la, Costa Rica, Perú, Chile y Colombia, por mencionar algunos países.
Acerca de agricultura re- generativa, ver también (en inglés):
COVID-19: Yet another tri- gger for an Urgent Paradigm Shift in the Agricultural and Food System
35
El IICA ante el Covid-19
Made with FlippingBook Annual report