CÓMO PUEDE AYUDAR A SU ADOLESCENTE
Las investigaciones llevadas a cabo demuestran que hay muchas cosas que Teri hace que reducirán las probabilidades de que Jeremy sufra consecuencias asociadas con el consumo mezclado de alcohol y marihuana. 1. Las investigaciones han demostrado que entre más hablen los padres con sus hijos sobre el consumo de alcohol y marihuana, menos probabilidades tendrán de consumirlos mezclados y sufrir consecuencias. 2. Estudios demuestran que el ejemplo de los padres está asociado con el consumo de alcohol y marihuana de los hijos. El bajo consumo de alcohol de Teri y su marido y el hecho que no consumen marihuana son protegen a su hijo y disminuyen su riesgo. 3. Estudios indican que nunca es demasiado tarde para que los padres hablen con sus hijos sobre el consumo de alcohol y marihuana. Cuanto mayor sea la calidad de la comunicación de los padres, menos probable es que sus hijos universitarios beban alcohol y consuman marihuana mezclados y que sufran consecuencias. El seguimiento y las conversaciones continuos de Teri protegen a su hijo y disminuyen su riesgo.
Una pregunta común que escuchamos de los padres es: "¿Qué puedo hacer para ayudar a reducir los riesgos de que mis hijos se hagan daño por beber alcohol o por mezclar alcohol y marihuana?" A continuación, se muestra un estudio de caso de una madre con la que muchos padres
pueden identificarse. Un estudio de caso
Teri tiene un hijo que estudia último año de secundaria y está considerando asistir a una universidad fuera del estado. Su hijo está interesado en los videojuegos y los deportes, y trabaja como voluntario en su comunidad. Teri ha hablado con su hijo sobre consumir alcohol (y sobre la marihuana) desde que estaba en los primeros años de secundaria y continúa "haciendo seguimiento" con bastante regularidad. Teri y su marido son padres bastante normales. Prefieren pasar tiempo con amigos cercanos y familiares los fines de semana mientras cenan y se toman unos tragos, pero nada nunca fuera de control y sin consumo de marihuana. En su último año de escuela permiten a su hijo tomar una pequeña copa de vino o una cerveza en ocasiones muy especiales. De lo contrario, no se permite ni se fomenta el consumo de alcohol. Teri ha oído hablar del consumo excesivo de alcohol que tiene lugar en las fiestas y se preocupa como muchos padres, pero siente que al mantener las líneas de comunicación abiertas y dialogando con su hijo sobre los riesgos, ella está haciendo todo lo que puede. Hasta donde sabe, él evita las fiestas los fines de semana, pero ella sabe que ha habido al menos una o dos ocasiones en las que salió con amigos donde había alcohol y marihuana.
Pase a la página siguiente para enterarse sobre qué mas puede hacer Teri.
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