Situación y evolución de la economía circular en España
Los países pioneros en EC, como Bélgica, Fin- landia y los Países Bajos, están siguiendo sus primeras políticas desarrolladas en 2016-2017, mientras que otro nutrido grupo de países que han adoptado políticas de EC más recien- temente, entre los que se encuentra España («España Circular 2030», publicada en 2020), han optado por desarrollar primero una estra- tegia general. En ella, se definen las principales líneas de acción y, complementariamente, se implementan planes de acción que contienen medidas detalladas y actividades concretas que, en todo caso, necesitan disponer de una estructura de gobernanza sólida y bien coordi- nada para definir los mecanismos de planifica - ción, implementación, financiación, participa - ción y seguimiento. Sin embargo, solo algunas de las estrategias de EC, incluso para los países europeos situa- dos en la vanguardia, pueden considerarse efectivas para enfrentar los urgentes desafíos de una «circularidad sostenible» acorde con los ambiciosos objetivos en materia climá- tico-ambiental de la Unión Europea. Por ello, resulta relevante la necesidad de promover la circularidad a nivel nacional, regional y local mediante la adopción de políticas e iniciativas que vayan más allá de las regulaciones y de los elementos obligatorios marcados por la UE, tales como los que recoge el Plan de Acción de Economía Circular de 2020. Aunque los Estados miembros comparten mayoritariamente los planteamientos básicos de la UE a través de sus planes de acción y recomendaciones generales, existe una amplia diversidad de enfoques, objetivos estratégicos, sectores seleccionados, indicadores y meca- nismos de apoyo sobre EC, donde se presen- tan algunos de los puntos comunes y singulari- dades similares. La denominación de las iniciativas de econo- mía circular en los distintos países de la UE no es uniforme y se suelen expresar como
estrategias, hojas de ruta, planes de acción y acciones diversas. No obstante, en general, las estrategias nacionales de EC contienen una serie de componentes estructurales, objetivos, enlaces con otras políticas, líneas de acción sobre la cadena de valor circular, instrumentos de gobernanza y marco de seguimiento. La mayoría de los países de la UE coinciden en señalar las áreas y sectores prioritarios como construcción, industria, sistemas alimenta- rios, ciclos del agua, textil y plásticos, aunque también se mencionan con menor frecuencia la bioeconomía y las tecnologías de la informa- ción y las comunicaciones (TIC), y escasamen- te se refieren al sector del turismo (a excepción de algunos países turísticos como España). Un tema central de las estrategias y políticas de EC en los Estados miembros de la UE es la renovación y ampliación de la gestión de residuos sobre las normativas existentes. Los enfoques más innovadores en este ámbito se relacionan con soluciones más amplias que incorporan medidas de prevención de residuos, incluidas intervenciones específicas como esquemas de depósito-devolución, jun- to con otras acciones dirigidas a la mejora de infraestructuras y al aumento de la eficiencia de los procesos de prevención, gestión, trata- miento y recuperación de residuos. Mientras, se nota una menor dedicación, a pesar de los esfuerzos en investigación bastante gene- ralizados, en el ámbito de la ecoinnovación, el ecodiseño y el diseño para reparabilidad. Esto, en gran parte, es debido a una falta de regulación específica, lo que puede suponer un retraso en el desarrollo de estas fases del ciclo de vida que son cruciales para avanzar en la innovación circular. A pesar de los esfuerzos en el ámbito de los re- siduos, se constatan notables dificultades para cumplir los objetivos de la UE. Las diferencias entre países europeos en materia de residuos son palpables y marcan tendencias de gestión
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