reconózcalo y busque si hay alguna manera de perdonarse a usted mismo. Si cometió un error de juicio, probablemente usted éste fue el más correcto que podía haber hecho en ese determinado momento. Trate de no exagerar su papel en la muerte de su ser querido. En muchos casos, otros factores fueron ampliamente responsables por la muerte de su ser querido. Es importante reconocer que la persona que asesinó a su ser querido fue o es a quien se debe culpar. Hablar con otras personas que entienden de alguna manera su experiencia puede ayudarle a ver su culpa realísticamente. Será un trabajo arduo tanto para ellos como para usted. Sentirse menos culpable no se llevará su tristeza o su rabia, pero puede quitarle un gran peso de sus hombros. Valdrá la pena el esfuerzo para liberarse a usted mismo. Fe/filosofía de vida La gente que antes no tenía un enfoque en Dios o que no creía en una vida después de la muerte pueden hacerlo después de un trauma. De la misma manera, la gente cuya fe juega un papel significativo en sus vidas puede cambiar algunos de sus pensamientos y creencias básicos relacionados con su fe. Probablemente le han dicho que la muerte
de su ser querido fue la voluntad de Dios; que debía perdonar. Trabajar para superar los asuntos relacionados con la fe puede tomar tiempo y puede ser otro componente difícil del duelo.
Trabajar para superar algunas cosas puede tomar tiempo.
Duelo complicado Aunque reacciones al dolor como tristeza, ansiedad, rabia y miedo son normales, una complicación sicológica más seria
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