¡Todas las Madres tenemos superpoderes !
“Gracias a Dios por darme la bendición de ser madre,he sido una luchadora“
Maura Burgos, Asistente de Turno de la Estación La Norteña
porque de ser una mujer tan activa y dinámica, cambió mi manera de ser totalmente. Agradezco a todos mis compañeros que me apoyaron y trabajaron por mí, estuvieron pendiente a mi salud y me dieron mucho ánimo de que no estaba sola en mi trabajo, ellos me ayudaron a conservarlo porque en ningún momento pusieron excusas para cubrirme. Se lo he demostrado con hechos de que gracias a ellos también tengo a mi hija y disfruto hoy día de esa bendición de Dios, mi hija ya al día de hoy tiene un año y días y es idéntica a mí y está sana y con mucha salud (come de todo). Lo mejor de ser madre es tu sentir esa criatura dentro de ti, como se mueve, es una emoción saber que alguien vive por ti y dentro de ti y cuando nace es el mejor momento de una madre, ver a su hijo por primera vez, yo puedo tener cualquier problema, pero desde que veo a mi hija todo lo negativo se va y es un momento de disfrute y de agradecimiento a Dios por tan linda bendición. El momento que más añoraba era escuchar la palabra Mamá y ya mi hija me concedió esa dicha y de ver como llora por mí para que la cargue y la abrace. Ahora mi deber es cuidarla, educarla con valores y deseo de superación, para que ella entienda que nada es imposible y que los límites solo se lo pone uno mismo.
A mediados del 2016 salí embarazada en ese entonces estaba en la Estación Alcarrizos, por decisión de Dios perdí el embarazo con 4 semanas y media ya de gestación caí en depresión que hasta el pelo se me cayó, pero con la ayuda de Dios y la Doctora salí embarazada de nuevo 6 meses después (quería un hijo) pues desde el segundo mes hice presencia de amenaza de aborto, presenté inicio de Preeclampsia, el líquido se me salía y no estaba produciendo hormonas suficiente para que la criatura se formara, pues dado a mi situación tan delicada me trasladaron de Alcarrizos a Próceres y finalmente a Norteña, llegando a Norteña agravé mi situación con la presión alta y fue una lucha constante para regularizármela y estaba en juego mi vida y la de la criatura, finalmente luché y luché con oraciones y medicamentos que a los 7 meses de embarazo, nació mi hija Alison Marie de 6 ¾, el día 2 de Mayo 2017, una niña sana y fuerte como su madre, estoy eternamente agradecida de Dios y de mi gerente de zona Domingo Matos, que buscó la manera de que me sintiera cómoda y sin presión de trabajo para que mi embarazo fuera lo más exitoso posible ya que se me notaba las ansias de tener un hijo y después de tener esa pérdida, todo el que me rodeaba sabía que lo sufrí,
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