Desde un principio seguimos al héroe, Paul Atreides quien busca refugio con los oprimidos nativos del planeta Arrakis -también llamado Duna- a quienes llaman Fremen, en contra de los agresivos encargados imperiales, los malvados Harkonnen, quienes explotan la producción de especia en el planeta y se enriquecen a costa de ello. La extracción de especia resulta altamente peligrosa, ya que el mundo desértico alberga gusanos gigantes, los cuales son adorados de manera religiosa por los Fremen. Es en este contexto donde seguimos un viaje del héroe típico del protagonista Paul, pero con intenciones un tanto nefastas y con resultados moralmente dudosos.
En lenguaje cinematográfico, Duna es una obra maestra, presume de una impresionante fotografía y puesta en escena. Este hecho no es de sorprenderse, ya que el director canadiense Denis Villaneuve se ha caracterizado por la excelencia a lo largo de su carrera, y cuenta con un amplio currículum en el género de la ciencia ficción, habiendo dirigido anteriormente Blade Runner 2049 y Arrival. Los actores también brillan por su excelencia, con un conjunto conformado por grandes nombres como Stellan Skarsgard, Javier Bardem, Timotheé Chalamet y Zendaya. Cabe también destacar la actuación de Austin Butler, anteriormente famoso por Elvis, quien encarna a un villano memorable.
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