2. Si toda tu vida existe dentro de los parámetros de los límites de tiempo, ¿qué áreas de tu vida están creciendo tanto que resultan en una falta de crecimiento en otras? Al examinar cómo estás viviendo, ¿vas a lamentar las áreas de tu vida que se están reduciendo? 3. ¿Hay evidencia en tu vida de que no estas viviendo dentro de los límites ordenados por Dios? ¿Cómo te describirían tus hijos? ¿Estás disfrutando de un tiempo vibrante con el Señor? ¿Estás recibiendo tu identidad por medio de tu ministerio? ¿Hay una falta de equilibrio en tu vida? ¿Estás pastoreando apropiadamente a tu familia? ¿Estás diciendo “si” repetidamente para recibir cosas que no deberías recibir de tu ministerio? ¿Dónde estás diciendo “si” que impide tu vida devocional con el Señor y tu tiempo con familia? ¿Cómo te está hablando el Señor acerca de las áreas de tu vida que estás descuidando? 4. ¿Cuáles son las partes de tu vida donde tienes miedo de que sean descubiertas? Si te has vuelto insensible al pecado en tu vida o estás atrapado en un pecado habitual, pídele al Señor ahora que te dé un corazón blando. Confiesa tu pecado a Él y a una persona de confianza, y pídeles que oren para que tu corazón no siga endureciéndose. ¿Quién puede ver tu corazón para ayudarte a verte a ti mismo con claridad? 5. ¿Sueles orar para que el Señor te dé sabiduría? ¿Estás asumiendo que eres más sabio de lo que realmente eres? ¿Por qué crees que el Señor considera la aceptación de la debilidad un atributo piadoso del carácter? ¿Estás aceptando tus debilidades con facilidad? ¿Qué medios puede usar el Señor para ayudarte a aceptar debilidades específicas en tu vida? Si pudieras aceptar esas debilidades, ¿de qué maneras podría mejorar tu ministerio personal? PARA APLICACIÓN PERSONAL Estos aspectos del estudio pueden usarse entre las sesiones en grupo como parte de tu vida devocional y de confesión. Haz Algo Durante la próxima semana, convierte lo aprendido en acción. 1. Toma unos momentos intencionales para examinar tu rutina diaria y anotar los límites que el Señor te ha dado. Si estás descuidando tu vida devocional con el Señor o tu tiempo con familia a causa de otras prioridades, pídele al Señor que te dé sabiduría para reorganizar tu tiempo y horario de modo que des prioridad a estas cosas importantes. 2. Pide a las personas más cercanas a ti que te describan y que expliquen cómo funcionas en la actualidad en la vida personal y ministerial. Pregunta también a tu esposo(a) y a tus hijos. Haz la misma pregunta a tus amigos, y colegas según su experiencia contigo. 3. Si aún no tienes a alguien, invita a una persona a tu vida y dale la oportunidad de enseñarte tus cualidades buenas y también tus imperfecciones. Comprométanse a reunirse cada semana para hablar sobre sus debilidades y su vida real. Comunícale claramente que tiene la libertad de aconsejarte, atender tu pecado y también señalar las áreas de piedad que pueda ver. 4. Rodéate de personas sabias, experimentadas y piadosas. Ten un corazón abierto y enseñable.
Sesión 1
LÍDERES GLOBALES DEL EVANGELIO
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