EL MUNDO DE SU HIJO Cuando los niños entran a la escuela secundaria y posteriormente al bachillerato, sus cuerpos en proceso de maduración crecen a ritmos diferentes, lo que conlleva a una incomodidad a nivel social, pueden enfrentar el dilema de con quién entablar amistad y cómo encajar, encuentran mayores responsabilidades y exigencias por parte de la escuela y de su propio hogar y pueden también enfrentar nuevos dilemas morales acerca de comportamientos arriesgados y uso de sustancias. Sus cerebros se enfocan en lo que pasa ahora mismo, basando decisiones en emociones inmediatas en vez de en qué consecuencias pueden ocurrir en el futuro como resultado de sus acciones. Cuando se trata del alcohol, los chicos pueden conocer algunos riesgos, pero su experiencia puede tener más impacto que los hechos. Pueden pensar: “Mi amigo o mis padres toman y nunca ha pasado nada malo”. No asuma que hechos y estadísticas van a convencer a su hijo de evitar el alcohol. Es importante tener reglas familiares claras acerca de qué hacer si se encuentran en una situación donde se presenta alcohol. “Casey, mi hijo mayor, era lo que usted llamaría un ‘buen chico’, en el cuadro de honor todos los semestres, miembro de la banda, del coro; practicaba la lucha y jugaba futbol americano. Realmente nunca me preocupé mucho durante todo el bachillerato. Tenía la falsa sensación de seguridad de que él tenía la madurez de alguien que podía manejar su licor, pero estaba equivocada. ¿Qué haría si pudiera repetirlo todo de nuevo? Dejaría mi mensaje muy claro ”. Comentarios de una madre cuyo hijo falleció por envenenamiento por alcohol a los 18 años. Lea el resto de la historia de Casey en madd.org/powerofparents.
El mundo de su hijo
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