Los artífices: dos siglos de educación en México

construyeron los talleres de fundición, herrería, automóvi- les, ajuste y mecánica, los cuales después se utilizaron para la instalación del gimnasio del Instituto Politécnico Nacio- nal ( IPN ). En 1936, el ITI se convirtió en el IPN y Wilfrido Mas- sieu fue designado director de las obras de construcción por órdenes de Juan de Dios Bátiz, jefe del Departamento de Enseñanza Técnica e Industrial de la SEP . De este modo nacieron la Vocacional 1 (hoy Cecyt 1) y la Escuela Técnica Industrial (hoy Cecyt 11), nombrada Wilfrido Massieu en honor a su fundador. El ingeniero Massieu trabajó de manera incansable por la profe- sionalización de las actividades técnicas del país. En aquel momento, desde los años veinte hasta mediados de los cuarenta, México pasó por un periodo de modernización e industrialización muy intenso en el que la expropiación petrolera y la construcción de presas, puentes y carrete- ras tuvieron su contraparte educacional en la creación de instituciones como el IPN , del que el oriundo de Tacubaya fungiera como director de 1940 a 1942. Wilfrido Massieu murió a los 65 años en Acapulco, Guerrero. Su importante legado para la fundación y promoción de la educación téc- nica de nuestro país se prolongó por medio de uno de sus hi- jos, Guillermo Massieu Helguera, quien fue el primer neuroquímico mexicano y, como su padre, director del IPN .

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