Los artífices: dos siglos de educación en México

Elvia Carrillo Puerto (1881-1968)

Nuestro mayor deseo es que no pase inadvertida la mujer, que tiene tanto derecho como el hombre para obtener beneficios económicos y educativos. D esde muy joven, Elvia Carrillo Puerto aspiró a la independen- cia, a educarse y a vivir de for- ma plena, a contracorriente de muchas mujeres de su tiempo. Fue una adelan- tada en varios ámbitos: la lucha por el sufragio femenino, la emancipación de la mujer y el activismo por los derechos ciudadanos en México.

Siendo poeta y profesora, destacó por mostrarse partidaria de la libertad sexual, el divorcio y el control de la natalidad, y por oponerse a la tiranía religiosa. Perteneció a una familia de 14 hermanos, y si bien siempre estuvo muy cerca de su hermano Felipe hasta que él murió, su lucha social y a favor de los derechos le valió un lugar por sí misma en la historia del país. Originaria de Motul, en Yucatán, cuando Elvia era niña y asistía a clases conoció la lengua maya, ya que muchos obreros la hablaban. Fue en esos días escolares cuando se dio cuenta de la in- justicia y la desigualdad social, lo que significó un doloroso despertar de su conciencia cívica. A esto contribuyó haber encontrado en la poeta y maestra Rita Cetina Gutiérrez a su mentora. Cetina había fundado una escuela secundaria para mujeres en Yucatán y la escuela, so- ciedad científica y literaria y revista feminista La Siempreviva .

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