El trabajador del futuro: conectado, versátil y seguro

Impacto de la innovación en el futuro del trabajo

do en base a un análisis de la proporción de las actividades laborales para cada ocupación que tienen el potencial de ser automatizadas). La Covid-19 podría ahondar en algunos de los fenómenos que antes de la pandemia se supo- nía que podrían tomar una década en materia- lizarse. Un ejemplo directo de esta posibilidad es la adopción de la automatización, ya que los robots no son susceptibles al virus, creando incentivos para automatizar. Así mismo, la Covid-19 podría retrasar o reducir la creación de empleo en trabajos que involucran la inte - racción humana y que han sido considerados como protegidos de las tecnologías digitales, como las artes. Al igual que con las ocupaciones, vemos que los grupos demográficos con mayor riesgo de pérdida de empleos a corto plazo por la pande- mia también tienen mayor riesgo de desplaza- miento debido a la automatización.

3.6.1 Análisis de los retos

DISRUPCIONES Y CAMBIOS EN EL MERCADO DE TRABAJO

Una consecuencia inmediata de la crisis del Covid-19 ha sido la parada abrupta en la mi- gración, con los países de toda Unión Europea, debido al cierre de fronteras para contener la propagación del virus, con la excepción de los viajeros transfronterizos y los trabajadores agrícolas migrantes. Después del Covid, tam- bién es posible que la atracción de las mega- ciudades y los grandes centros urbanos se desvanezca a medida que las personas elijan vivir en áreas menos densamente pobladas, haciendo un mayor uso de las tecnologías digitales y el nuevo estímulo que supone el teletrabajo (McKinsey, 2020). La migración transfronteriza puede volverse menos atractiva si los viajes y movilizaciones requieren de cua - rentenas durante los brotes de enfermedades. Incluso en un escenario optimista donde el virus es contenido dentro de los dos o tres me- ses después del cierre económico, el desem- pleo en Europa habrá aumentado bruscamente en 2020-2021, y solo volverá a los niveles anteriores a la crisis a partir del cuarto trimes- tre de 2021. En un escenario más pesimista, Europa necesitará implementar medidas de distanciamiento y cuarentena físicas durante más tiempo, por lo que es poco probable que el empleo se recupere a los niveles de 2019 antes de 2024. Tres grupos ocupacionales representan apro- ximadamente la mitad de todos los trabajos en riesgo en Europa: servicio al cliente y ven- tas, servicios de alimentos y construcción. Según McKinsey (2020), los trabajos que están en mayor riesgo por la pérdida de empleos a corto plazo se superponen en cierta medida con los más vulnerables al desplazamiento a través de la automatización (que se ha estima-

Este es especialmente el caso de las personas con bajo nivel educativo. Según las estimacio - nes de McKinsey (2020), alrededor del 80% de los trabajos en riesgo en Europa (46 millones) están ocupados por personas que no tienen enseñanza superior. En general, los empleados sin una cualificación superior o terciaria tienen casi el doble de probabilidades de estar ocu- pados en trabajos en riesgo, que aquellos con un título universitario. La crisis también podría

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