controlada a la población. Pero un grupo insurgente atenta contra ese nuevo orden mundial y se dedica a combatir estas mentiras. A partir de esta original narrativa, el videojuego ayuda a colectivos especialmente vulnerables al fenómeno de la desinformación — baby boomers , miembros de la Generación X, inmigrantes digitales, millennials y adolescentes, entre otros— a protegerse de las noticias falsas y de los ciberdelitos propios de nuestro mundo real. �Es una cuestión preocupante desde el punto de vista educativo, porque son mensajes que penetran en la sociedad y suponen un peligro serio para las democracias. Este videojuego nos permite llegar hasta el público de forma efectiva porque, además, es un canal que les resulta muy cercano�, explica el investigador de la Unex, Jesús Valverde. El reto ha requerido varios años de desarrollo y ha generado un conocimiento previo al diseño y lanzamiento del videojuego, que se plasmó en el artículo científico �Desinformación y multialfabetización: una revisión sistemática de la literatura�, publicado en la revista Comunicar . El texto revisa a fondo la literatura académica sobre el fenómeno de la desinformación y analiza los diferentes modelos de alfabetización digital que existen para identificar las noticias falsas y promover un pensamiento crítico entre la ciudadanía.
De acceso gratuito y al alcance de todos los públicos, Forge of Destiny contribuye a formar a la población en un ámbito tan sensible como el de las fake-news , que en los últimos tiempos han multiplicado su capacidad de propagación gracias a las redes sociales y al uso generalizado de los dispositivos móviles. Hoy la información aterriza directamente en nuestros teléfonos, sin necesidad de hacer nada para ir a buscarla. �Tenemos intención de influir educativamente en los jugadores, porque nuestra propuesta permite la reflexión y el intercambio de puntos de vista�, explica Valverde. Su compañero de investigación Alberto González coincide en la necesidad de dotar a los ciudadanos de herramientas que fomenten el espíritu crítico para que luego sean capaces de filtrar por sí mismos todo lo que les llega por las pantallas. Los autores sostienen que el nuevo entorno digital exige que la población desarrolle nuevas competencias para la selección, búsqueda, consumo y producción de información. �Parece que lo que encontramos en la red debe ser 100% fiable y no es así. Se deben consultar siempre varias fuentes para contrastar, porque cada día es más difícil detectar los bulos y el poder de la desinformación es más y más fuerte�, advierte González. ■
101
Made with FlippingBook - Online Brochure Maker