COMPETENCIAS DIGITALES Y COLECTIVOS EN RIESGO DE EXCLUSIÓN EN ESPAÑA
2020: las mujeres han pasado de tener un 2,8 % menos de probabilidad que los hombres de poseer habilidades básicas frente a no tenerlas a un 5,3 % menos, siendo esta diferencia sensiblemente significativa. Por nacionalidad, el efecto es algo más intenso en 2020 que en 2019, aunque la diferencia no es significativa: los extranjeros muestran en 2020 un 14,1 % menos de probabilidad que los nacionales. Por grupos de edad, la diferencia ha aumentado significativamente, especialmente entre los más jóvenes de un 16,7 % a un 23 %. Por niveles de estudios, sin embargo, la brecha en la probabilidad de tener habilidades digitales básicas entre personas de mayores niveles educativos y aquellas con estudios básicos se ha reducido significativamente en 2020 en 4,1 pp para los estudios medios y en 5,3 pp para los estudios superiores. Algo parecido sucede con la variable de situación laboral, ya que la brecha entre estudiantes, ocupados y parados se ha reducido significativamente en 2020 respecto a los inactivos. Así pues, tanto en lo que concierne a nivel de estudios como a situación laboral, parece haber un proceso de convergencia en el año 2020 a favor de las personas con menores niveles de estudios y los inactivos. El nivel de ingresos mensuales es en este caso significativo en todos los tramos analizados con efecto positivo en la probabilidad a medida que aumenta su nivel. Además, se observa un aumento de la brecha entre 2019 y 2020 frente al menor tramo de ingresos (menos de 900 euros mensuales), especialmente y de manera significativa en los dos tramos de mayores ingresos así como en el tramo de 900 a menos de 1.600 euros, donde el efecto prácticamente se ha duplicado. Por tamaño del municipio no se observan cambios significativos en el año 2020. Finalmente, usar Internet a diario conlleva entre un 13 % más de probabilidad de tener habilidades básicas en 2019 y un 11 % en 2020 (la diferencia no es significativa), mientras que tener bastante o mucha confianza en Internet ha reducido su
efecto de mayor probabilidad de tener habilidades a prácticamente la mitad.
Así, para el efecto de tener habilidades digitales básicas frente a no tenerlas, entre 2019 y 2020 se ha reducido la brecha en características como el nivel educativo y la situación laboral frente a la categoría de referencia (estudios básicos e inactivos, respectivamente), así como en la confianza en Internet, mientras que la brecha ha aumentado ligeramente por niveles de ingresos mensuales netos de los hogares y grupos de edad, en especial entre edades medias y mayores y entre el tramo de renta más alto y el más bajo, así como entre mujeres y hombres. Como muestra el gráfico 54, el efecto más importante es el del nivel educativo, ya que tener estudios superiores implica en 2020 algo menos del 30 % más de probabilidad de tener habilidades básicas frente a bajas. Las siguientes características que conllevan mayor efecto sobre la probabilidad de tener habilidades básicas son los dos mayores tramos de ingresos mensuales netos, que se han intensificado en 2020, el grupo de edad (los más jóvenes frente a los más mayores). Por otro lado, el efecto de ser estudiante frente a inactivo se ha reducido considerablemente entre 2019 y 2020, así como la confianza en Internet. El efecto también de ser mujer frente a hombre se ha intensificado en 2020, pasando de un -2,8 % de probabilidad de tener habilidades básicas respecto a los hombres en 2019 a -5,3 % en 2020. Finalmente, ser extranjero tiene un efecto negativo relativamente importante (en torno a -14 %).
6.2. Regresiones tipo probit ordenado
En este apartado se presentan los resultados de las estimaciones del tipo probit ordenado donde la variable dependiente puede tomar tres valores: 1 (sin habilidades o bajas), 2 (habilidades básicas) y 3 (habilidades avanzadas). Por lo tanto, se
86
Made with FlippingBook - Online Brochure Maker